En Dinamarca existen sitios como este, que quitan el aliento por lo bonitos que son.
Esta es para mi la verdadera Navidad, la casa perfecta donde celebrarla y el sueño de cada quien ame la calidez y la personalidad de los interiores nórdicos...
La casa es antigua, datada finales del 1800 y por eso la atmósfera que se respira es ya en si misma llena de tradición y personalidad. Las puertas vienen de Francia, la chimenea es sueca, y cada decoración navideña tiene su propia historia.
Antes de Navidad, me imagino la actividad de la casa... colgando decoraciones en el árbol (que seguramente proviene directamente del bosque al lado de casa), horneando pasteles de canela, preparando el glógg (típica bevanda caliente y picante del Norte Europa- de echo, muy alcolica ;-)
Y todo eso después de relajante paseo en el bosque lleno de nieve, o de una vuelta en trineo con los niños.
¡Que maravilla debe de ser la Navidad para estos peques!
Aunque los adultos también se lo deben pasar bien: la dueña, Stine Bolthers, admite tener 7 cajas de adornos guardadas toda el año y ¡listas para ser sacadas en la temporada de Navidad!
Yo pensaba de tener muchos, con mi pobre cajita... pero voy aumentando cada año, el secreto es no tirar nada, y guardarlo todo muy muy bien. Aunque con una casa así, ¡que más dan los adornos!
Un reportaje espectacular. A uno se le olvida que ha llegado el frìo, el cual tambièn tiene su encanto. Enhorabuena
ResponderEliminarLinda la decoración y los paisajes :)
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